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La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) en la Seccional de Patagones de la Provincia de Buenos Aires, mantuvo una reunión con integrantes del Poder Ejecutivo local donde advirtió a las autoridades sobre la situación que atraviesan empleados municipales en relación a los empobrecidos salarios y la pérdida constante de poder adquisitivo y alcanzó un acuerdo de aumento de sueldos para trabajadoras y trabajadores del área de Salud de la municipalidad.

En dicho acuerdo se alcanzó un 15% al básico en septiembre sobre el cálculo de junio, un 100% de aumento en bonificaciones remunerativas y no remunerativas, un cambio de categoría a más de 100 agentes, el pago de horas extras fichadas y aumentos en el valor de la jornada hospitalia en septiembre y octubre.

Finalmente tras varios días de negociaciones, el Secretario General de ATE en la Seccional de Patagones, Gustavo Paleta, aseguró: «Luego de ocho días de medidas de fuerza con un total acatamiento en los sectores de salud y en paralelo un reclamo salarial y por persecuciones. Hemos logrado en el día de ayer en el Ministerio de Trabajo importantes acuerdos. Si bien no son los esperados, no dejan de ser importantes avances».

«Somos conscientes que es un proceso lento, que además estamos siendo afectados por la problemática de la coparticipación, teniendo en cuenta que la salud es municipal, donde no hay una carrera hospitalaria, donde hay una superpoblación, lo que se convierte en un problema al momento de repartir esa partida de dinero que ingresa al municipio, lo que trae como consecuencia sueldos por debajo de la línea de la indigencia», culminó Paleta.

ATE aseguró que aceptó el acuerdo pero aún así lo consideró insuficiente y planteó al Ejecutivo la necesidad de continuar con el diálogo para alcanzar mejoras en salarios y condiciones laborales, además rechazó cualquier tipo de persecución. Se fijó para el 10 de octubre la próxima instancia de discusión salarial.

ATE en Patagones llevo adelante distintas medidas de fuerza para visibilizar el conflicto

El sindicato rechazó previamente otros ofrecimientos realizados por las autoridades.

Además los trabajadores y trabajadoras municipales realizaron varias medidas de fuerzas entre ellas paro de actividades y concentraciones.

ATE aseguró que los ofrecimientos fueron insuficientes en relación a los índices de costos de vida que aumentan mensualmente de forma desmedida. Además el distrito se encuentra en zona patagónica, por lo que los precios de servicios esenciales y alimentos son aún más elevados.

En la actualidad un trabajador municipal jubilado percibe pesos 150.000 de salario, cuando según datos calculados por ATE Indec en dicha región el salario mínimo debería rondar los pesos 1.140.337.

ATE señaló en un comunicado: “Estamos atravesando una de las peores crisis, sumada a la situación nacional,  los sueldos no alcanzan a cubrir la canasta básica, muchos de ellos están por debajo de la línea de la indigencia, teniendo en cuenta que los trabajadores municipales cobran desde $185.099 a $313.274 según su escalafón. Además expresaron que “es preocupante la emigración de profesionales producto de los magros sueldos, lo que se refleja en el vaciamiento del sistema sanitario”.